CLITORALIA

  Le pregunte un día a el por mensaje ¿cual era la parte que mas recordaba de mi?, y me dijo que - mi clitoris-

 No pude evitar sonreir al leerlo, sin embargo me quede pensando ¿por que esa parte?

Aunque a simple vista en mi cuerpo solo se aprecia su punta o glande, mi clítoris se extiende por el interior de los labios mayores, del perineo y rodea el tercio inferior de mi vagina. Mis amados labios son dos almohadillas que cubren los labios internos. 

Mi clítoris es parcialmente visible, pues sólo mi prepucio y glande están situados fuera del cuerpo, coronados por los dos lunares que pocos han visto y que se generaron después de mis dos enchufes sexuales sagrados. Realmente mide unos 10 cm, como la media de un pene sin erección, como tres cuartas partes de lo que mide el suyo, ese que decía amar, desear, que olía con gran alegría.

Mi 'botoncito' es solo la parte visible de un órgano que se extiende varios centímetros hacia el interior de mi cuerpo. Ese que no necesita los vibradores tradicionales para brindarme placer. 


Seguido cuando estoy en casa, semidesnuda, mirando al techo de mi habitación completamente blanco recuerdo que en cada lugar donde estuvimos mire el techo y jamás importó su color.  Lo extraño es que aún cuando estoy sola sigo mirando al techo, y me decidí a pensar que la excitación es mental, si miraran lo que en mi cerebro pasa cada que la profundidad del techo se abre. No importa si estoy con el amor de mi juventud, o con el innombrable, o con mi experto sodomita puedo pensar que ingreso al cosmos y que puedo estar en la dimensión que desee. La excitación está en mi deseo, en mi máquina vibradora y estimulante que algunos llaman materia gris. Que tiene una tecnología precisa, la reacción física es irreflexiva y espontánea, aun habiendo disociación cabeza-cuerpo. 

O sea, que puedo satisfacer un deseo que ni siquiera he llegado a tener, pero que evidentemente esta ahí en mi subconsciente. Hace unos días me sorprendí deseando un trío HMH Homosexual, es algo que en mi mente no ronda muy seguido. Quiero tener una "penetración en linea" si es que eso existe, ya saben - verlos desearse, tocarse y de pronto uno de ellos se pueda poner en cuatro para recibir el miembro del otro, y a su vez  mirarlos en el espejo de la pared. Mientras el que ha sido invadido, sostiene su miembro erecto en la entrada de mi vulva pidiendo ingresar, no sin antes "tocar el timbre" ... antes que pueda llegar a imaginar quién eyacula primero, y mientras mis piernas punzantes se guíen a la par de mi pelvis el apogeo se adelante a mi expectativa. 

O sea, que el clímax ya no es la culminación de una intensidad creciente, sino un estado efímero, muy fácil de provocar, que no requiere más que pulsar un botón. 

Lógico, en la era del clic y la inmediatez, en la que todo se consigue así, sin que aparentemente cueste nada. Mi clitoris se lo regalé a un idiota, ¿como no iba a extrañar el control? De tanto placer y relajación.

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